Primarias. Lo dijo el precandidato Miguel Lifschitz, al referirse a las propuestas por fuera del Frente Progresista. Bonfatti aseveró que nunca se hizo tanto por la ciudad como desde 2007.
os precandidatos de Adelante Santa Fe por el Frente Progresista esperan confiados las primarias del domingo. Así lo manifestaron el gobernador Antonio Bonfatti (precandidato a diputado provincial); el postulante a sucederlo, el senador Miguel Lifschitz y quien aspira a pelear por la senaduría provincial del departamento La Capital, el periodista Emilio Jatón. En diálogo con Diario UNO, hablaron del futuro inmediato del Frente, de la inseguridad, de lo demandado y lo hecho en la capital provincial. Bonfatti y Lifschitz subrayaron que la oferta opositora al Frente, es volver al pasado.
—¿Cómo llegan al cierre de campaña?
Antonio Bonfatti (A.B.): Muy bien, con mucha solidez, recorrimos cada ciudad, cada punto de Santa Fe llevando nuestros mensajes, haciendo un balance de la gestión de estos siete años con los hechos concretos que logramos y reconociendo los déficits a recuperar en los próximos cuatro años.
—¿Qué diferencia su propuesta de la de Mario Barletta?
Miguel Lifschitz (M.L.): Somos dos propuestas dentro del Frente Progresista, la que a mí me toca representar con (el ministro de la Producción) Carlos Fascendini es la que mejor expresa la continuidad del Frente, con un camino que inició Hermes (Binner) y continuó Antonio. Porque reúne a la mayor parte del Frente Progresista, entre ellos el propio Antonio y (el vicegobernador) Jorge Henn, que van a encabezar la lista de diputados provinciales. La mayoría de los senadores actuales, siete de ocho están integrando nuestro espacio; 12 de 16 diputados, 23 de 26 intendentes, y así sucesivamente. Eso indica que logramos, sino la unanimidad, por lo menos una amplia mayoría, muy representativa del frente y del proyecto que construimos en estos años.
—¿Van a quedar heridos tras esta interna, que fue caliente?
A.B.: Desde nuestra parte siempre se escucharon propuestas, nunca agravios. El Frente Progresista tiene 20 años en Santa Fe. Es un ejemplo para el país de construcción política por las diversas pertenencias partidarias. Pero el 20 estamos todos trabajando juntos, yo no tengo ninguna duda.
—¿Y qué diferencia a los candidatos del Frente de la oferta opositora?
M.L.: Son proyectos políticos muy distintos. Lo nuestro es un proyecto progresista, republicano, democrático, fundado en la ética pública, en el diálogo, en la calidad de las instituciones. Un gobierno que genera políticas de Estado, con un claro sentido progresista. Las otras propuestas, bueno, una (la de Perotti, en el PJ) me parece una réplica kirchnerista. La fórmula fue armada a imagen y semejanza de la Presidenta en la Casa Rosada. Lo otro (la de Miguel del Sel en el PRO) es una propuesta armada en la Capital Federal, a imagen y semejanza del proyecto del macrismo, con poco sustento político. Es una propuesta con aires de novedad que esconde los viejos discursos que tuvieron tanto peso en la política argentina de los 90. La idea de un Estado pequeño, de una educación pública restringida, de una salud pública solo para los pobres: los modelos de Estado chico y mercado grande, que ya mostraron su fracaso.
—La ciudadanía demanda seguridad. ¿Qué se propone de aquí en adelante?
A.B.: Seguir adelante con el proyecto diseñado porque los resultados ya se ven. Cuando hablamos de invertir en las personas, hablamos de culturas, de formas de hacer y los cambios no los veremos de forma inmediata. Nos animamos a reconstruir la policía y tardamos el tiempo necesario para que las transformaciones se produzcan. Hoy podemos hablar luego de siete años de una Policía de Investigaciones, una Científica, una Comunitaria, de Acción Táctica, de Seguridad Vial y ya vemos mejores indicadores. Y en los próximos meses vamos a ver más. Son cambios no solo de dotarlos de todo el equipo necesario, sino fundamentalmente cambiar la cabeza de cada uno. Sancionar lo que corresponde y el que saca los pies del plato pasa a disponibilidad o a retiro.
—El narcotráfico se tornó en un problema grave estos años. ¿Usted, si llegase a la gobernación, qué piensa hacer en este sentido?
M.L.: Lo que quedó claro es que lo veníamos diciendo desde hace varios años: el narcotráfico es un fenómeno de escala nacional. Claramente se está mostrando hoy su presencia en Capital Federal, en el Bajo Flores, a pocas cuadras de la Casa Rosada, en Mar del Plata, en Mendoza, en Córdoba, en Salta, en Jujuy. Estamos ante un problema grave y lo que no vemos son políticas activas del Gobierno Nacional para enfrentar el problema en la escala y la dimensión que merece. Desde Santa Fe, pusimos en marcha todas las herramientas que tiene el Estado para atacar el problema aun siendo un delito federal, o sea, sobre el que no tenemos competencia. Sin embargo, se creó la Secretaría de Delitos Complejos. El año pasado hubo más procedimientos antidroga que en todos los anteriores. Ahora, en la medida que no cortemos el chorro de droga que entra por las fronteras, que ingresa por las aduanas, que traspasa los controles de Gendarmería para llegar a Santa Fe, vamos a actuar siempre sobre el último eslabón de la cadena.
—¿Van a insistir con el pedido de fuerzas federales?
A.B.: Las pedimos en infinidad de oportunidades. Durante dos años clamé en soledad. Cuando vinieron, mandaron solo a Rosario. Pedí para toda la provincia. Cuando se fueron de Rosario, insistí para que vuelvan. Tengo los mails que le mando todas las semanas al jefe de Gabinete, pero no somos los que tomamos las decisiones. Ni los ministros nacionales toman las decisiones. Hay que pedirle permiso a la Presidenta.
—Hubo reclamos por parte del intendente José Corral por el manejo de la empresa de Aguas y el arreglo de cañerías en la ciudad. Parece una crítica a ciertos privilegios para el tratamiento de Rosario sobre Santa Fe en esta y otras cuestiones. ¿Qué piensa usted gobernador al respecto?
A.B.: Nunca en la historia de la ciudad Santa Fe hizo tanto en obras. Es la provincia la que está haciendo luego de 101 años el pavimento de Alto Verde, la autovía de la ruta 1, la Circunvalación Oeste, la que hizo mitad de la ruta 168, la autovía en la ruta 19 que conecta Santo Tomé con San Francisco, las defensas del cordón oeste contra las inundaciones, la que recuperó el patrimonio histórico de la ciudad. La provincia está haciendo el hospital Iturraspe y el Cemafé, el desagüe Llerena y ahora el Larrea, que vale 352 millones de pesos. Todo dinero de la provincia. El Plan Abre, una intervención en los barrios como nunca antes, el aporte a los clubes. ¡Mire si la provincia hizo cosas por la ciudad capital! Y finalmente, después de tanto bla bla, licitamos el Puerto, el traslado. Impide concretarlo, por una coyuntura que no elegimos, en la que los potenciales adjudicatarios manifestaron su inquietud por la contingencia que se vive a nivel nacional, incertidumbre, cambio de gobierno. Pero ahí está, el puerto licitado.¿No hay oferentes? Se volverá a licitar. Y si hay que cambiar alguna ecuación, se cambiará. Pero, en definitiva, nunca se hizo tanto por la ciudad de Santa Fe como en el gobierno del Frente Progresista.
FUENTE: DIARIO UNO
Más historias
Pullaro sobre la Convención para la Reforma: “Vamos a construir los consensos para tener la mejor Constitución del país”
TRAS MÁS DE DOS MESES DE ESPERA, EL GOBIERNO HOMOLOGÓ LA PARITARIA DE LA UOM Y HABILITÓ AUMENTOS DE SUELDOS EN EL SECTOR
24M en Rosario: multitudinaria marcha por la Memoria, la Verdad y la Justicia